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Educadores y alumnos cuestionan las necesidades en este año lectivo, según OTEP-A 

El secretario general de la Organización de Trabajadores de la Educación del Paraguay – Auténtica (OTEP-A), Gabriel Espínola, dijo que el 2022 fue un año lectivo muy complicado y con muchas necesidades tanto para los docentes como para los alumnos.

16 de noviembre de 2022

En comunicaciones con la 1140 AM, Gabriel Espínola señaló que “este ciclo lectivo que culmina estuvo cargado de varios desafíos a nivel educativo, así como también de diversas necesidades que afectaron tanto a los docentes como a los mismos estudiantes”.

Expresó que durante la pandemia en el intento de realizar mejoras en el sector educativo en aspectos cómo la comunicación efectiva entre docentes y alumnos al implementar la virtualidad, infraestructuras y útiles escolares con las condiciones necesarias de los centros educativos; no ha sido fácil debido al déficit existente en la educación en general, por lo que han requerido de un acompañamiento ampliamente integral que fue orientado desde el punto de vista teórico. Pero a raíz de no contar con la presencia de profesionales especializados y de calidad que lleven a cabo esa tarea se ha generado una grave problemática.

Indicó que se ha visibilizado el acrecentamiento de ciertas situaciones cómo por ejemplo: Haber accedido formalmente a los elementos tecnológicos que faciliten la comunicación entre docentes y alumnos pero con los que no se tiene garantizada la conexión contínua e ininterrumpida a Internet, lo que ha significado que un gran porcentaje de los estudiantes no ha podido seguir el proceso conductor hacia el aprendizaje efectivo.

Espínola ejemplifica a la situación con aquellos casos pandémicos en los que durante el periódo de 2020 y 2021, niños cursantes del 1° grado han hecho la transición al 3° grado en el presente año lectivo 2022, a pesar de no haber atravesado previamente por un proceso significativo de aprendizaje. Por otra parte y de carácter similar también aquellos alumnos que durante el acecho de la pandemia en 2020 al estar cursando el 8° grado, parten al 2022 con el nivel secundario del 1° de la Media sin haber tenido una orientación previa para lograr asumir y comprender los contenidos programáticos que siguen significando un déficit de aprendizaje de gran impacto en los estudiantes.

Señaló que a raíz del ''encierro'', la presión psicológica y el hecho de estar muy involucrados con los elementos tecnológicos por el que atravesaban los estudiantes han desarrollado también una indisciplina estudiantil significativa que actualmente se visibiliza en las instituciones educativas de manera presencial.

Por otra parte añadió que significativamente el porcentaje de aquellos estudiantes que han culminado el bachillerato en 2020 y posteriormente en 2021 han intentado ingresar a la universidad ha sido muy diferente en comparación de años anteriores. Señala que uno de los reflejos más llamativos en la calidad educativa se encuentra en los altos niveles estadísticos de las solicitudes y reclamos sobre la disminución de puntajes mínimos para las pruebas de adjudicación de becas.

“El hecho de retomar la presencialidad después de dos años de pandemia significó un tropiezo por no haber tenido un acompañamiento sólido por parte de los estamentos técnicos del Ministerio de Educación y Ciencias'', añadió acerca de la situación en la que se encuentra el sector.

¿Cómo es visualizado el sistema educativo implementado en la actualidad desde la gestión de gobiernos anteriores en la dictadura?

Indica que Paraguay ha tenido un salto cuantitativo importante en términos de cobertura, se ha podido superar el 98% de incorporación al sistema educativo de niños y niñas en edad de estar en la misma. Por otra parte, en el ámbito en el cuál no se ha podido se refiere a lo cualitativo a raíz de no abordar con la suficiente solidez en llevar a cabo la transformación en el ámbito de la formación inicial y contínua del docente. La formación docente en el Paraguay aún no ha llegado a encaminarse verdaderamente hacia una transformación significativa y beneficiaria para el sector estudiantil.

En términos generales, el referente de la OTEP-A expresa que la pandemia ha representado un grave y alarmante obstáculo en el intento de la formación de los estudiantes hacia un mejor porvenir y desenvolvimiento en la vida cotidiana al igual que la falta de profesionales docentes de calidad en las instituciones educativas.